Desde ese día que miramos la inmensidad juntos, hicimos un juramento mudo en el cual nos comprometimos a nunca dejar de estar en contacto, de nunca dejar de ser tan buenos amigos…

Muchas veces las hormonas nos han jugado en contra y tuvimos nuestros "deslices" (you know what I mind). Y la gente, oh, la gente, que siempre piensa mal, que un hombre no puede ser el mejor amigo de una chica, siempre tiene que haber "algo" ahí.

Aunque hoy, estar juntos es más complicado e imaginar esos viajes mucho más, nunca nos dejamos atormentar por esos fantasmas y seguimos siendo los mismo niños soñadores de siempre.-